Quizás no había lugar al miedo, aunque yo lo tuviera.
Todo indicaba que la manifestación "universal" del 19 de Junio iba a ser un éxito, y así lo fue; y hasta podría afirmar que superó las expectativas de muchos de nosotros.
Más de un millón de almas esperanzadas gritamos por todas las ciudades de España nuestra intención de cambiar el mundo éste, por uno mucho más justo y mejor.
Era un día muy importante para la consagración del movimiento ciudadano, y al final se ha convertido en un día inolvidable, de esos que te llenan el tanque de gasolina para llegar hasta donde haya que llegar sin desfallecer ni una pizca.
Se ha hecho la luz para nosotros, y de alguna manera daría las gracias a los políticos por ser tan inoperantes y tan iguales a todos los adjetivos despectivos que les queramos poner, los sobrepasan con creces.
Les doy las gracias, porque sin su incompetencia, quizás jamás hubiesemos sacado a relucir nuestras esperanzas. !Qué gran día! En más de una ocasión durante el transcurso de esta gran manifestación, se me erizó el vello de los brazos y mirándolos al trasluz tuve ganas de echarles una foto para no olvidar nunca tan esperanzadora sensación.
Chicos!!! por favor!!! No desfallezcais, esto no ha hecho más que empezar, y le tiene que quedar claro al mundo entero, que no vamos a parar hasta conseguir nuestros objetivos.
No permitais nunca más que os roben la esperanza de conseguir un mundo más justo. A mis cincuenta años estoy teniendo el enorme privilegio de vivir días nuevos, junto a vosotros.
